Melancolías invernales
¿Cómo puede ser tan sencillo caer en la desgana y el resentimiento? Cuando todo nos va bien, nos sentimos imparables, con altura de miras y exceso de confianza. Cuando todo nos va mal nos sentimos melancólicos, retraídos y hastiados.
El hastío. Qué curioso sentimiento. Cansancio de guerrear con la rutina. Hartazgo de caminar por los frondosos follajes de los caminos empedrados de la vida.
La melancolía. Tan dura. Tan lejana. Tan fría. Tan exasperante. Te hace sentir solo y solitario, olvidado y retraído. Desganado y confuso. Alejado de los asuntos mundanos que minutos antes tan importantes resultaban...
En lo más crudo del frío invierno todo parece más difícil. Una nevada constante en los corazones que nos hace aún más distantes e insolidarios de lo normal.
¿Por qué a veces todo resulta tan complejo...?
4 comentarios
Perry Green -
proyectoamazona -
Pero, a pesar de todo, no podemos olvidar que por mucho que nieve en nuestros corazones, aún conservamos un núcleo interno, como el de la Tierra,a miles de grados de temperatura, y que, aunque aletargado, sigue vivo. De él podemos y debemos sacar la energía suficiente para tomar un nuevo impulso.
Perry Green -
Lordrommer -
Cualquier cosa, no tiene que ser especial ni carisimo, cada uno tiene las suyas, sirve para desatascar y mandar ese hastío a la mierda, pero hay que dar el paso y no dejar a la rutina que gane la partida...
Ahí tienes a Pin ( o es Pon) que desde luego no va a ser la rutina lo que termine con el... XD